Un fenómeno del niño a oscuras

El desabastecimiento de agua en 285 municipios del país y una baja en el caudal de los principales ríos en un país como Colombia es una noticia alarmante, pues su producción energética está basada en hidroeléctricas con un 70,35%, seguido de plantas térmicas con un 29%.

Es por ello que cuando el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales de Colombia (IDEAM) indicó que el fenómeno del niño se extendería hasta marzo de 2016 e incluso más 

Es aun más alarmante la situación cuando se considera que algunas productoras de energía como Termocandelaria se encuentran paradas  lo que implica mayores cargas para las ya existentes, las cuales se desconoce si podrán dar abasto 24/7  a los requerimientos energéticos de las principales ciudades del país.

Puede que fallas intermitentes en el servicio no sean de mayor importancia para los usuarios residenciales puesto que un corte de luz no les afecta en mucho, pero para clientes industriales y quienes tienen centros tecnológicos es una noticia grave.

Quienes están en el sector industrial saben que una falla intermitente pero de constante presencia implica millonarias pérdidas, puesto que así sea sólo un segundo de interrupción del flujo eléctrico, la maquinaria y los dispositivos deben pasar por un proceso de reinicio el cual puede durar desde 5 minutos hasta 30, deteniendo efectivamente el ritmo de trabajo.

Esto es aún de mayor importancia en centros de datos puesto que durante estos reinicios, que no son casos aislados sino sintomáticos en una época en que escasea la energía eléctrica, perdemos clientes externos por denegarles el acceso a nuestras aplicaciones y retrasamos las labores de nuestros clientes internos, afectando su productividad.

Para evitar estas situaciones la mejor solución es tener un buen equipo de UPS que se ocupen de los fallos en la corriente y nunca dejen a nuestros equipos sin el flujo de corriente necesario. 

Para escoger la UPS que nos supla todas nuestras necesidades debemos determinar la duración que deseamos tengan las baterías de este sistema, existen variedades con una duración promedio de 5 años, mientras que otras opciones fabricadas con combinaciones de plomo-ácido tienen duraciones de hasta 16 años.

También debemos conocer cual es la carga energética que necesitamos, para poder determinar el volúmen y la capacidad que debe tener nuestro sistema de UPS. También debemos analizar el espacio donde se instalarán.

Por último debemos acompañar este sistema de UPS con un servicio de monitoreo de baterías, tras el cual no necesitamos volvernos a preocupar acerca de problemas de índole energética afectando el desempeño de nuestro datacenter.