Independientemente
del tamaño y el costo de la UPS (Suministro de poder ininterrumpido)
todas sufren un desgaste natural con el tiempo el cual puede llevar a
fallos en el equipo si no se manejan adecuadamente.
Es
por ello que vamos a darle una repasada a las maneras por las cuales
puedes intentar mejorar la vida de tus equipos y brindarle seguridad
a tus servidores.
Si
la UPS es de gran potencia usualmente se adquiere en conjunto con un
contrato de servicios con el vendedor. Este tipo de contratos
especifica que mientras se preste el servicio el vendedor estará
obligado a brindar mantenimiento preventivo a la máquina. En este
caso no será el usuario quien se responsabilice sino en su lugar
alguien calificado enviado por la casa matriz del producto o el
vendedor del mismo.
Pero
este tipo de contratos no son viables cuando la compra es de una UPS
pequeña, pues su valor podría superar el costo que tendría
reemplazarla por una nueva.
Por
otra parte un uso adecuado puede ayudar a extender la vida útil de
la UPS. Para ello debemos procurar evitar que se descargue la batería
completamente, ni exponerla a temperaturas extremas.
Cambiar
las baterías es una regla de
oro, pues con el tiempo estas tienden a perder su capacidad, cada vez
llevando menos energía hasta que mueren. Las UPS modernas vienen
incluso con sistemas de auto diagnóstico que
le indica a los usuarios cuando es el momento de reemplazar las
baterías internas.
El
cambio de baterías implica tener en cuenta a la hora de comprar las
dimensiones de nuestra UPS, puesto que una falla en la medida nos
obligara a realizar soldaduras y cortes indeseables pues reducen la
vida útil del equipo, y pueden llevar a fallas como fugas de ácido
que pueden dañar los equipos.
Es entonces que si se cambian las baterías de una UPS deben dejarse descargar y recargar varias veces antes de hacer las pruebas para determinar su capacidad completa, además que este proceso de llenado y vaciado ayudará a calibrar los medidores de la UPS para que se acostumbren a la nueva pieza.
Es
fundamental también evitar que se conecten los equipos a UPS que
presenten fallos o estén en la parte terminal de su vida, pues
pueden producir inconvenientes como fallas de inversión de cargas o
control inestable de los equipos.
Recordemos
que las baterías de una UPS no pueden ser arrojadas a la basura
ordinaria, pues contienen metales y ácidos que pueden generar
contaminación severa. Estas baterías deben ser dispuestas de manera
especial por entidades que tengan los mecanismos indicados para ello.