La acumulación de polvo u otros agentes es una constante en un datacenter, sea un closet o un mega centro del tamaño de un coliseo la suciedad y partículas en los equipos pueden exponerlos a sobrecalentamiento.
Para evitar algo así se debe realizar una limpieza en tres fases. La primera de ellas es la limpieza del hardware exterior, esta normalmente se realiza con aspiradoras, las cuales vienen certificadas para recoger hasta partículas de 0,3 microns de volumen.
También se pueden usar productos de limpieza para el hardware pero estos deben ser especiales pues estarán en contacto con equipos electrónicos y además ser acompañados mediante el uso de implementos estériles.
La segunda fase es la limpieza del piso del datacenter. Normalmente los pisos que encontramos en los datacenters son de materiales especiales para ayudar a disipar la energía estática que se puede acumular en ellos. Las herramientas usadas en esta fase deben asegurar que no son abrasivas pues si el piso termina por perder sus láminas pondremos el cableado estructurado y los mismos equipos electrónicos en peligro.
La última fase de este proceso consiste en eliminar las partículas del subsuelo. El subsuelo de un datacenter es ese lugar debajo del piso falso por donde pasa la mayoría del cableado que da al exterior y que une unos gabinetes con otros, además provee de aire frío filtrado a los equipos de arriba.
Esta debe ser la labor más ardua pues es aquí donde se le permite la acumulación del polvo , fibras de cableado y filamentos de zinc. Debe tener especial dedicación en la remoción de moléculas en este lugar pues las consecuencias de dejarlo allí son circuitos tapados, incremento del riesgo de incendio y daños que obliguen a la recompra del equipo causando inmensos costos.
